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De finales del 2015 que he realizado un seguimiento sobre el terrible proceso de endeudamiento de la economía Argentina. La misma se dio paralelamente con un proceso de ajuste en todos los niveles que destruyó el poder adquisitivo, el aparato productivo, dejando niveles inigualables de pobreza, indigencia, desocupación y exclusión pocas veces vistos.
Volver a Chacabuquero.
En medio de este panorama desolador, asume un nuevo gobierno con nuevos objetivos y nuevo rumbo o dirección en términos políticos, pero a pocos meses nos afecta la actual pandemia agravando la situación de extrema fragilidad.
Hoy nuestro gobierno nuevamente, al igual que el de Néstor, vuelve a renegociar la deuda en términos sustentable, dejando lugar para volver a crecer e incluir a los miles de Argentinos y Argentinas.
Un acuerdo sustentable donde nos ahorramos 30.000 millones de dólares y que nos va a permitir cumplir con los compromisos asumidos por el gobierno anterior, no caer en default y paralelamente comenzar un período de reconstrucción del País.
Firma: Darío Golía
El gobierno del Presidente Alberto Fernández logró imponer su principal concepto de la negociación: la sustentabilidad de la deuda.
Se canjeará un papel de deuda de 100 dólares de valor nominal por otro de 54 dólares, así la Argentina se ahorra 30.000 millones de dólares. Un enorme alivio para las finanzas nacionales que despeja un factor de inestabilidad económica constante.
Se empieza a reordenar el desquició y descalabro que dejó el macrismo de Cambiemos.
El acuerdo con los acreedores para restructurar la deuda no solto representa un alivio económico sino fundamentalmente político porque los bonistas dejarán de operar a través de los grandes multimedios desde donde presionaban fuertemente sobre una crisis económica profundizada por la pandemia.
En conclusión, un enorme triunfo político de Alberto Fernández en la defensa de nuestra soberanía nacional.
Firma: Espacio Patria
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